Gemoterapia + Danzaterapia + Cre-In® + Coaching Creativo

La GemoRelaxCreativa es una terapia alternativa que se basa en el Coaching Creativo con la técnica Cre-In® y le agrega Gemoterapia y Danzaterapia para personas con ganas de mejorar su calidad de vida de 20 a 100 años

Cambiar nuestra filosofía de vida....

Aprender a vivir, un artículo de CLarín Mujer nos permite preguntarnos: ¿como sería cambiar nuestra filosofía de vida?
Entonces dan consejos para bajar los decibeles:
La ansiedad es una de las formas que asume el estrés.
En su forma normal, es una sensación displacentera -como una amenaza difusa- que se caracteriza por molestias tanto psicológicas (emocionales) como físicas ante una situación dada y que desaparece una vez resuelta la situación que la dispara."Así lo explica la psicóloga Gisela Holc, del Centro de Estudios del Estrés y la Ansiedad, Hémera, quien diferencia también la ansiedad patológica, es decir, aquella que no cede cuando la situación está resuelta o cuando la intensidad no es proporcional al hecho que la generó.En sus formas normales, hay una serie de medidas que permiten disminuir sus efectos.
a. Reconocer que nuestro cuerpo (cuerpo/mente) tiene energía limitada y no exigirle más de la cuenta.
b. Aprender a relajarse (momentos de estar con uno mismo, tomar un baño sin apurones, escuchar música con sonidos de la Naturaleza, etc.)
c. Planificar, agendar tiempo para descansar, desenchufarse y conectarse consigo mismo y los afectos.
d. Divertirse, reirse y estar con amigos.
e. Identificar los pensamientos o diálogos internos que nos ponen nerviosos y las situaciones que nos disparan ansiedad, pero no para evitarlas sino para ir afrontándolas de a poco y lograr así superarlas.

Cuando sin ninguna razón aparente, se siente invadido por una incomodidad o un temor intenso, tal vez, experimentó: Palpitaciones, Sudoración, Temblores, Respiración entrecortada, Sensación de ahogo, Dolor en el pecho, Nauseas o molestias estomacales, Temblor en las piernas, Sensación de irrealidad o de pérdida de contacto con uno mismo, Miedo a morir o enloquecer, Sensaciones de adormecimiento u hormigueo, Escalofríos o flashes de calor, Experimentar temor a lugares o situaciones en donde obtener ayuda o salida puede ser difícil, Problemas para viajar sólo, sin compañía... ahí la ansiedad y el stress están golpeando.
En Helmérica cuentan: Hans Selye dijo la respuesta al estrés no era específica y propuso hablar de un "síndrome general de adaptación", agregando, en 1974, dos conceptos diferentes a tener en cuenta: el de estrés, para designar al sistema de respuesta normal con el cual convivimos, versus el de distrés, como el sistema de respuesta anormal o patológica.Mason, en 1968, hizo un aporte muy interesante al decir que el estresor, es decir el estímulo estresante, debe ser inédito, y que para que el mismo produzca una respuesta, debe haber sido previamente evaluado cognitivamente por el individuo.Es decir, que no influye tanto el estresor en sí mismo, sino la evaluación que se realice de esa situación de amenaza.Cualquier suceso que genere una respuesta emocional, puede causar estrés. Esto incluye tanto situaciones positivas (el nacimiento de un hijo, matrimonio) como negativas (pérdida del empleo, muerte de un familiar).Asimismo, situaciones que provocan estrés en una persona pueden ser insignificantes para otra.
Estrés y Distrés El estrés es la respuesta adaptativa del organismo en un nivel físico, mental y emocional a los estímulos. Por tanto, cierto grado de estrés es necesario ya que motiva y puede ayudar a las personas a ser más productivas o competitivas. Un determinado grado de estrés estimula el organismo y permite que éste alcance su objetivo, volviendo a la normalidad cuando el estímulo ha cesado. Por ejemplo, cuando un atleta intenta conseguir un buen resultado en una competencia, está sometido a un estrés que implica un aumento de la actividad muscular (más irrigación, el corazón late mas rápido, etc.) lo que le ayudará a conseguir su objetivo. Una vez finalizada la prueba atlética, se produce un descenso de las constantes y el organismo vuelve a su estado basal. Por tanto, ello no es algo malo en sí mismo, al contrario; facilita el disponer de recursos para enfrentarse a situaciones que se suponen excepcionales. Sin embargo, cuando los sucesos estresantes de la vida, ya sean de orden físico o psíquico, superan nuestra capacidad para afrontarlos hablamos de distrés, es decir, el estrés que se produce cuando los estímulos internos o externos superan nuestra capacidad de respuesta y adaptación, el cual, con el tiempo puede ser dañino para la mente y el cuerpo.
El distrés puede predisponer a la persona a tener una salud general deficiente, al igual que enfermedades físicas y psicológicas específicas tales como infecciones, enfermedades cardíacas o depresión. Pero como dijimos anteriormente, antes de llegar al distrés o estrés patológico, se produce una respuesta normal o fisiológica.
Respuesta fisiológica al estrés
Ante una situación de estrés, el organismo tiene una serie de reacciones fisiológicas que suponen la activación del eje hipotálamo-hipófisis-suprarrenal y del sistema nervioso vegetativo.
El eje hipotálamo-hipófisis-suprarrenal está compuesto por:
El hipotálamo, que es una estructura nerviosa situada en la base del cerebro que actúa de enlace entre el sistema endocrino y el sistema nervioso,
La hipófisis, una glándula situada en la base del cerebro, y Las glándulas suprarrenales, que se encuentran sobre el polo superior de cada uno de los riñones. El sistema nervioso vegetativo es el conjunto de estructuras nerviosas que se encarga de regular el funcionamiento de los órganos internos y controla algunas de sus funciones de manera involuntaria e inconsciente. Ante situaciones de estrés, ambos sistemas producen la liberación de hormonas, que transportadas a través de la sangre, regulan la actividad de los órganos. Estas hormonas son las encargadas de poner el cuerpo en estado de alerta, preparándolo para luchar o huir de la situación estresante, iniciando así una reacción en cadena en el organismo: el corazón late más rápido y la presión arterial sube; la sangre es desviada de los intestinos a los músculos y el nivel de insulina aumenta para permitir que el cuerpo pueda metabolizar más energía.
Estas reacciones permiten evitar el peligro y a corto plazo no son dañinas. Son las que permiten enlazar el fenómeno del estrés con los fenómenos psicofisiológicos de la emoción.
¿Por qué se produce el distrés?
Si la situación estresante persiste, la fatiga resultante será nociva para la salud general del individuo. El distrés puede estimular un exceso de ácido estomacal, lo cual dará origen una gastritis o a una úlcera. O puede contraer aún más arterias ya dañadas, aumentando la presión y precipitando un dolor precordial o un infarto cardiaco. Así mismo, el distrés puede provocar una pérdida o un aumento del apetito con la consecuente variación de peso en la persona. Cuando se mantiene el agentes estresor y se entra en el estado de distrés, las personas empiezan a tener una sensación de disconfort (tensión muscular, palpitaciones, etc.). Si continúa el estresor, se llega al estado de agotamiento, con posibles alteraciones funcionales y/u orgánicas: son las llamadas "enfermedades de adaptación".
Problemas del estrés
Lo que en situaciones apropiadas puede salvarnos la vida, se convierte en un enemigo mortal cuando se extiende en el tiempo.Las presiones económicas, la sobrecarga de trabajo, el ambiente competitivo, etc., son circunstancias que en el mediano y largo plazo desencadenan enfermedades.Entre las mismas pueden mencionarse enfermedades: Cardiovasculares: cardiopatías, hipertensión arterial, infarto.
Músculo esqueléticas: lumbalgias, tendinitis, cervicobraquialgias, fibromialgias. Emocionales: irritabilidad, depresión, ansiedad, insomnio. Dermatológicas: dermatitis, reacciones alérgicas. Sexuales y ginecológicas: disfunción eréctil, anorgasmia, amenorrea. Gastrointestinales: dispepsia, úlcera, diarrea, cólicos, colitis ulcerosa. Asimismo, muchas enfermedades autoinmunes, neuroendocrinas y otros desequilibrios psicofisiologicos tienen como elemento en común al distrés, que predispone, acelera y empeora el desarrollo de estos padecimientos. ¿La preocupación es excesiva y ocurre más días de los que no, por un período de seis meses o más? ¿Considera que las preocupaciones son exageradas y sobre un número de acontecimientos o actividades, tales como trabajo, colegio y/o salud? ¿Siente incapacidad de controlar la preocupación, como que se le va de las manos? ¿Presenta por lo menos tres de los siguientes síntomas?
¿Sensación de cansancio, sentirse agotada/o o al límite? ¿Se cansa fácilmente? ¿Tiene problemas para concentrarse? ¿Irritabilidad?
¿Tensión Muscular?
¿Problemas para dormir o despertares durante noche, sueño liviano o no el suficiente? ¿Su ansiedad interfiere con su vida cotidiana?
FUENTE: Hémera, Centro de Estudios del estrés, fobias y la ansiedad

Desde la gemoterapia y el coaching creativo podemos comprobar que las personas con problemas en:
  • Pulmones: (que por ejemplo nunca han fumado) han tenido un problema emocional muy intenso
  • Páncreas: (que nunca han ingerido alcohol) han tenido preocupaciones exageradas, angustia y miedos intensos.
  • Hígado: (que no comen en exceso ni de forma inadecuada) son proclibes a la ira y agresión reprimida
  • Estómago (que no se dan atracones y están en peso) suelen tener una oralidad insatisfecha.
  • Riñones: en general han tenido un susto o mucho miedo en su niñez, temores o han sido amenazados a corta edad.
  • Intestinos delicados: han tenido una madre exigente y fría.
  • Suprarenales: siempre tienen una sensación de peligro gral seguramente provocado por traumas infantiles.

A cada uno de estos problemas se pueden aplicar gemas para nivelar las energías.La meditación y el hacer foco sobre la causa real del problema suelen ser un aliado importante de la medicina para que se pueda modificar el efecto y tomar decisiones correctas en esto de "cambiar nuestra filosofía de vida" para que la enfermedad no se repita nunca mas.